¿Lo Bueno... o lo Mejor?

"Escoge entre lo bueno y lo mejor"… jamás había reflexionado en esta frase como los primeros días en los que estuve en la Escuela de Misiones a la que asistí.

Una frase que puede parecer insignificante, pero en su interior contiene tanto valor, porque de hecho sí, hay cosas muy buenas, pero qué pasa si te digo que hay algo mejor, que es excelente y completo, y que en medio de un mundo donde todo se puede, no todo te conviene.

Creo que es lo que todos a diario buscamos, lo excelente, no queremos andar por la vida a medias, aunque a veces lo hacemos; pero el mayor deseo del ser humano es siempre obtener lo mejor, aunque esto sea contradictorio - por ejemplo - con su actitud ante Dios.

Y bueno, quiero contarte un poco de lo que he visto, pero no sin antes aclarar que me da en parte risa y miedo hacer esto. Cuando sentí que Dios me habló de que escribiera acerca de escoger entre lo bueno y lo mejor, pensé que era enserio ridículo.

Creo que, aunque en muchas ocasiones he tenido la oportunidad de escoger lo mejor, he escogido lo fácil y lo que se queda tan solo en ‘bueno’, así que sentía que era absurdo que yo me tomara el atrevimiento de hablar de esto.

Pero lo hago, porque la gracia me reta a hablar desde mis dificultades y debilidades, y conforme a ellas, no verlas como limitantes sino como impulsadores que me llevan a vivir cada vez más cerquita de Papá y dependiente de Él.

Mientras pensaba en escribir esto tan solo venía a mi mente David, hablando de pureza después de haberla embarrado bien feo con Dios.

Pero desde las cenizas encontró su lugar de victoria, así que considérame como un David, hablando de un corazón puro después de cometer su más grave error, pero chocándose de frente con los increíbles brazos de la gracia, que lo inspiraron a entonar hermosas canciones desde su lugar de vergüenza.

Así que, quiero explicarlo un poco más: “El perezoso trabaja doble”; por más de que queramos lo mejor, creo que entre más atajos nos muestren hasta la meta - tentadores para llegar más rápido y más fácil - escogemos todo lo bueno, lo bonito y lo barato, porque nos cuesta pagar el precio de lo excelente.

Pero, y si te digo que por caminar unas millas más te vas a encontrar con todo lo que un día Dios planeo para ti. Creo que la mayoría de seres humanos han optado por pensar en sus propios esfuerzos, en sus propios caminos, porque temen a la incertidumbre del proceso.

A través de esta serie lo único que deseo es que juntos aprendamos a correr a los brazos del Padre, para tomar las decisiones más fáciles y también las más difíciles de Su Mano.

Vuelvo y repito, porque no todo lo que brilla es oro y no todo lo que está a nuestro alcance nos conviene. Para aprender a diferenciar entre lo que solo brilla y lo que realmente es oro, necesitamos la sabiduría del Padre.

Así que gracias por acompañarme hasta aquí y recibe un ‘tiquete VIP’ para que nos encaminemos juntos a seguir aprendiendo con humildad y determinación en este camino de la vida, que nos reta cada día a tomar las mejores decisiones para que ellas reflejen a Jesús en el proceso… ¡Te espero la próxima semana!